CIUDAD ROTA

 

Alan Sutton y sus criaturitas de la ansiedad despidió el año a pura dopamina, bidón de nafta e hipopótamos en Auditorio Oeste 

El cronista se volvió loco con el titulo que puso¿? , no querido lector , este muchacho Alan Sutton , nacido en vaya saber a dónde. Hace 3 años detono internet con su tema: “No tengo hambre, tengo ansiedad” y luego fue un sucesivo torbellino de éxitos, discos y videos clips, con un nivel de locura, que, para cerrar el concepto de artista y no fenómeno de internet, hizo una gira internacional, por millones de lados, hasta internacionales, que finalizó el 30 de noviembre en Auditorio oeste, porque ya sabemos el popular dicho: “en el Oeste está el agite”.

Me avisan de la producción que estoy acreditado, tomo el colectivo desde mi casa, hasta Auditorio, abandono a mi hijo a pocas cuadras, quédense tranquilos, en la parada lo esperaba su abuela. Un viaje rápido y a punto de llegar me doy cuenta que soy el ultimo en este bondi a Finisterre y el chofer me dice: ¿quién toca hoy? Vi mucha gente esperando entrar, le respondo un pibe que se hizo viral con sus canciones por internet y me dice si ya se quien es acá los choferes me muestran sus videos y todo, y me dice; para pibe te dejo en la puerta así te bajas y entras, me abre las puertas del bondi justo en la puerta, parecía la “su Gimenez” versión de un programa de Capusotto, al entrar ya había ocurrido las primeras canciones; Bonsai , TUTANK’MON , si llegue 10 minutos tarde.

El escenario era un cuadro, mezclado con Monet, Dalí, Münch, y anda saber cuántos artistas más. Alan y sus criaturitas estaban vestidos como si sus outfits estarían manchados  por dichos artistas ya nombrados, las luces eran bombas de colores y tus ojos no podían saber para donde mirar y encima este grotesco circo, estaba coronado por el público que iba desde unos 8 años de edad hasta 99, si era como las instrucciones de una caja de juguetes.

Las canciones y las locuras iban sucediendo entre si mezclando a sus fans, cuando parecía que iba a explotar todo, Alan frena esta sinergia llama a su banda a sentarse al pie del escenario de esta ex fabrica y empieza un set acústico , anunciando que el año que viene se estrena el disco “Berrinche” , antes de empezar evoca a una gran referencia que tiene todo ser humano , su madre , esta le había escrito en forma de prosa unas palabras de que significa berrinche , que mas una sabia madre para explicar este primer paso del niño al adolescente.

Al terminar dicho set, o pausa, en Auditorio oeste llego la temperatura a niveles del infierno de Dante por que siguieron temas como: Omatopopih(si hipopótamo al revés)  , algo tiene que cambiar , Héroe de constitución, Paris es un buen lugar para morir y otros temas de su basto repertorio , para dar para dar paso a otro momento emotivo , Un día a la vez.

Y cuando parece que la fiesta llegaba a su fin, se vino una versión exquisita de la, Grasa de las capitales, obviamente de la mega banda Seru Giran . Luego Alan nos conto su rivalidad con Nicolas Cage que le compuso un tema a dicho actor y luego todo se volvió un boliche con su hit Dopamina y obviamente la cereza del postre: “no tengo hambre, tengo ansiedad” que hizo que este circo de criaturitas ansiosas se vaya con una sonrisa de locura a sus casas y una promesa que el año que viene vamos a tener muchos berrinches de este asombroso artista que no solo es una cara bonita de internet, si no un complejo genio artístico.